Genres: | Kids, Børn, Drama |
---|
Los amiguitos marinos Bruda, Bobbi, Wayu y Puri se embarcan en pequeñas aventuras en el océano, donde la vida cotidiana está salpicada de momentos mágicos.
En el pícnic de la escuela, a los amigos se les hace la boca agua al oler el pastel de plancton que han preparado Bruda y su madre. ¡Menos mal que hay para todos!
A Bobbi se le ha caído un diente en el Arrecife de las Cosquillas. ¿Lo ayudarán sus amiguitos marinos a encontrarlo? Claro que sí... ¡y sin parar de reír!
Mientras sus amigos juegan, Puri se hace amigo de una pequeña araña de mar. Al principio, los demás se asustan, pero pronto se dan cuenta de que no hay nada que temer.
Wayu ve algo extraño mientras juega a la pelota cerca de la escuela, pero sus amigos no la creen... ¡hasta que algo les abre los ojos!
Bruda quiere prepararle la comida a su madre, pero le faltan ingredientes y le pide ayuda a Wayu. Va a ser el plato más delicioso del mundo... ¡y el más picante!
Bobbi suele ser valiente, pero se pone nervioso cuando toca ir de excursión en un autobús muy especial. Al final, lo único que necesita es un poco de motivación.
¡Chiss! El grupo debe tener paciencia y esperar en silencio a que florezca el coral arcoíris. Después de todo, ¡es algo excepcional que no pasa todos los días!
Puri encuentra una piedra peluda con una suave cola y largas orejas. Al final, descubre que es una rara criatura a la que le encantan el arte y sus nuevos amigos.
Bruda está tan orgulloso del libro despegable que ha hecho con su madre... ¡que Bobbi no se atreve a confesarle que lo ha roto!
Puri sale de su ordenada casa para ir a jugar a la de Wayu, que vive con sus abuelos, sus primos y sus tíos... ¡bajo unas reglas muy distintas!
El tamaño de Bruda es una desventaja a la hora de jugar al escondite, así que debe ser muy creativo para encontrar el lugar perfecto donde ocultarse.
Bobbi está enfermo y tiene que quedarse en la cama, pero sus amigos se las ingenian para jugar con él. ¡Solo tendrá que estar tranquilo y prestar atención a las pistas!
Wayu intenta mantenerse limpia y aseada para la foto escolar, ¡pero así es imposible divertirse! A fin de cuentas, lo importante es lucir una gran sonrisa...
Cada uno de los amigos lleva una cera a la escuela, y la señorita Aim les dice que dejen que los colores «hablen». ¿El resultado final? ¡Una auténtica obra de arte!
Es el Día del Profe, y todos tienen un regalo para la señorita Aim. Bruda está preocupado porque el suyo no es muy grande, ¡pero lo que cuenta es la intención!